El consumo de antiulcerosos en España ha aumentado de 33,3 DHD
(dosis por habitante y día) (DDD [dosis diarias definidas] por 1.000
habitantes/día) en el año 2000 a 136,8 DHD en 2012, o sea que en 2012 diariamente tomaban un medicamento antiulceroso 136,8 personas de cada 1.000 (véase figura 1 del Informe de utilización de medicamentos U/AUL/V1/15012014).Este
aumento se ha producido por el consumo de inhibidores de la bomba de
protones (IBP) y específicamente de omeprazol, que ha aumentado en más
del 500% (véase figura 2 del mismo documento).
Los IBP representan el 96,2% del consumo total de antiulcerosos en España (2012) y son el subgrupo terapéutico más prescrito, con el 7,32% del total de envases en el año 2010.
Según datos facilitados por el Institut Català de Salut (ICS), durante 2014 el Estándar de Calidad Asistencial (EQA), que evalúa la actividad asistencial, destacaba que un 54,7% de las indicaciones de los IBP en prevención de gastropatía son inadecuadas.
El indicador EQA-0222 del Programa EQA del ICS aporta información del número y del nombre de los pacientes que están recibiendo IBP sin que en su historia clínica informatizada (ECAP) conste ningún diagnóstico aceptado para su uso.
Actualmente se está llevando a cabo un estudio sobre la efectividad de dicho indicador en el Servicio de Atención Primaria Osona (Barcelona). La impresión inicial es que los cambios que se han conseguido con este objetivo básicamente han consistido en reducir el número de pacientes con diagnóstico inadecuado y poco el consumo (DHD).
El Grupo de Trabajo de Atención Primaria (AP) de la Comissió Farmacoterapèutica (CFT) del ICS ha publicado en la ECAP (intranet) una información sobre el uso de IBP con el objetivo de mejorar su prescripción.
Esta información está dirigida a los profesionales (anexo 1). Destacamos especialmente el resumen de las indicaciones de los IBP:
En el Área Básica de Salud de Santa Eugènia de Berga del Servicio de Atención Primaria Osona (ICS), se planteó efectuar un paso más: enviar a los pacientes de la lista de prescripción inadecuada una carta personalizada firmada por su médico de familia (anexo 4) para informarle de que los profesionales del centro de salud iniciamos una campaña de mejora del tratamiento.
Jordi Espinàs. Coordinador del Comité Editorial de la Guía terapéutica de la semFYC.
Los IBP representan el 96,2% del consumo total de antiulcerosos en España (2012) y son el subgrupo terapéutico más prescrito, con el 7,32% del total de envases en el año 2010.
Según datos facilitados por el Institut Català de Salut (ICS), durante 2014 el Estándar de Calidad Asistencial (EQA), que evalúa la actividad asistencial, destacaba que un 54,7% de las indicaciones de los IBP en prevención de gastropatía son inadecuadas.
El consumo de IBP en España es dos y tres veces superior al de Europa.
Más del 50% de sus indicaciones en prevención son inadecuadas.
El indicador EQA-0222 del Programa EQA del ICS aporta información del número y del nombre de los pacientes que están recibiendo IBP sin que en su historia clínica informatizada (ECAP) conste ningún diagnóstico aceptado para su uso.
Actualmente se está llevando a cabo un estudio sobre la efectividad de dicho indicador en el Servicio de Atención Primaria Osona (Barcelona). La impresión inicial es que los cambios que se han conseguido con este objetivo básicamente han consistido en reducir el número de pacientes con diagnóstico inadecuado y poco el consumo (DHD).
El Grupo de Trabajo de Atención Primaria (AP) de la Comissió Farmacoterapèutica (CFT) del ICS ha publicado en la ECAP (intranet) una información sobre el uso de IBP con el objetivo de mejorar su prescripción.
Esta información está dirigida a los profesionales (anexo 1). Destacamos especialmente el resumen de las indicaciones de los IBP:
- Enfermedades gastroesofágicas: úlcera gástrica o duodenal, erradicación de Helicobacter pylori, enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), síndrome de Zöllinger-Ellison.
- Gastroprotección de los antinflamatorios no esteroideos (AINE).
- Edad avanzada (> 65 años).
- Antecedentes de úlcera, hemorragia, perforación gastroduodenal.
- Necesidad de tratamiento prolongado con AINE a dosis máximas.
- Uso concomitante de glucocorticoides y/o anticoagulantes y/o antiagregantes (clopidogrel, ácido acetilsalicílico (incluso a dosis bajas), prasugrel y/o ticagrelor) y/o antidepresivos (inhibidores selectivos de recaptación de serotonina [ISRS]) o duales.
- Comorbilidades graves (cardiovasculares, renales, hepáticas).
- Gastroprotección en pacientes que toman antiagregantes (menor evidencia):
- Antecedentes de úlcera, hemorragia, perforación gastroduodenal.
- Uso concomitante de AINE y/o anticoagulantes y/o doble antiagregación.
- Dos o más de los siguientes factores de riesgo: edad avanzada (> 65 años), dispepsia, síntomas de ERGE, uso de glucocorticoides.
En el Área Básica de Salud de Santa Eugènia de Berga del Servicio de Atención Primaria Osona (ICS), se planteó efectuar un paso más: enviar a los pacientes de la lista de prescripción inadecuada una carta personalizada firmada por su médico de familia (anexo 4) para informarle de que los profesionales del centro de salud iniciamos una campaña de mejora del tratamiento.
Jordi Espinàs. Coordinador del Comité Editorial de la Guía terapéutica de la semFYC.